Cuándo nada es suficiente y todo lo abruma al mismo tiempo. Está adolescencia es a veces tan contradictoria, se sienten grandes pero a la vez tan indefensos.
Muchos han visto crecer al enano, ver sus logros y sus tristezas.
En esta nueva etapa, lo siguen como todo un adolescente, que de por sí, no está resultando nada sencillo.
¿Qué es lo más duro?
-Sus contestadas, que apresar de ha crecido con la libertad de expresar lo que piensa, ahora lo impone y cuestiona cada indicación que recibe. -Su cambios de humor ya que pasa amor sensaciones nuevas que a veces no logra entender. -Su rebeldía y sus ganas de sacarte de la ecuación. -El no querer hacer nada tanto en casa como en el colegio (a menos que sea algo que realmente le encante). -Que ande con una pesadez para todo con el popular "volteada de ojos" -Que quiere ser grande para ser "libre e independiente" pero a su vez quiere a su mamá en momentos específicos. -Que ya no compartamos tantos momentos y gustos en común.
¿Qué es lo más bonito?
- Que podemos tener otro tipo de conversación, una más madura. -Ver cómo sus gustos evolucionan y cambian. -Ver cómo empieza a preocuparse por su aspecto personal (aunque mil veces al día diga que no le interesa lo que opinen los demás). -Que defiende a capa y espada sus puntos de vista (aunque muchas veces patine). -Ver cómo le interesa interactuar con amistades específicas e ir a fiestas.
Cada etapa tiene su encanto y es que realmente con #babyF en camino, se ha convertido en toda una odisea para mí, el desgaste emocional que a veces se presenta es complicado.
Pero felizmente tengo a mi tribu para apoyarme y sus destellos de amor incondicional e infinito salen a la luz en los momentos precisos, aunque debo admitir que extraño a mi pequeña melcocha.
¿Ustedes que tienes adolescentes en casa? ¿Cómo lo están llevando?
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