Estamos a 06 semanas para conocer a #babyF y sin querer queriendo y siendo sincera, la ansiedad viene a visitarme de tanto en tanto.
Este 2022 ha sido complejo en muchos sentidos... Mi hijo, ha cursado un primer año de secundaria en donde después de dos años de virtualidad, regresó a sus clases presenciales, en dónde fue a conocer por primera vez a sus compañeros y palpar de cerca la poli docencia. Este último, ha sido todo un rollo, tratar de que los profesores entiendan la manera en la que mi enano trabaja y lidiar con los cambios que conlleva la adolescencia definitivamente retador en su totalidad.
Con el anuncio de que #babyF llegaría a completar nuestra familia, muchas cosas cambiaron, las dinámicas, mi salud por el tema de las hernias en la columna (cosa que ya sabíamos que sería todo un reto) así como el tiempo que compartía con mi hijo.
Por un lado, sabía que él tenía que aprender por si mismo a lidiar con varios temas, hacerse más independiente, más responsable tanto en casa como en el colegio y sobre todo a compartir a su mamá.
~Un cambio radical que sí necesitaba~
No ha sido un año excelente a nivel escolar, pero lo está pasando, realmente no lo he ayudado mucho y eso me pesa. Su carácter es como una montaña rusa, pero por ratos, veo a ese pequeño niño que se me colgaba del cuello y que sólo quería estar pegado a mamá.
¿Porqué ansiedad? Pues por qué en un abrir y cerrar de ojos, el año escolar acabará, #babyF llegará a nuestros brazos y tendremos que re acomodarnos nuevamente, claro sumando a todos los por menores del parto en sí.
Pero de eso se trata, de aprender a recibir los cambios con buenos ojos y el corazón abierto.
Un día a la vez.
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