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Foto del escritorKIARA

Yo respiro y me relajo

Hoy tempranito hubo una reunión con el psicólogo del cole y vimos la técnica de respiración para controlar los momentos previos al cuadro de impulsividad que por lo general presenta. Claro, mi primera pregunta fue, como va a identificar si por lo general es reactivo. Pues me indicó que un trabajo continuo de respiración acondiciona al cerebro a actuar por inercia a penas sienta que el cuadro va a iniciar o si siente que algo no está bien. La técnica consiste en una respiración trabajando el diafragma, este músculo es el que recibe en el caso de #LittleF y asumo en los demás, toda la tensión en el momento de crisis es decir cuando sienten que van a explotar, así que lo ideal es trabajarlo y a su vez este ayudará a controlar el episodio. La respiración diafragmática o también conocida como la técnica del globo, lleva gran cantidad de aire a la zona baja de los pulmones, que es la que tiene más capacidad, por ello garantiza una mejor ventilación, captación de oxígeno y limpieza de los pulmones con la exhalación.
El primer paso para enseñarles a nuestros peques y para practicarlo nosotros mismos es hacerlo acostados boca arriba cómodamente con una mano sobre la pancita para que ellos sientan como se infla y hacerlo de una forma lenta y pausada.

Se inhala por la nariz profundamente y se retiene por unos 3 segundos, ahora ese oxigeno no debe inflar la caja toráxica si no el diafragma, dirigiendo el aire al inhalar “hacia tu abdomen” como si quisieras empujar hacia arriba las manos que están sobre él abdomen.




Para algunas personas no es tan fácil realizar esta técnica y tampoco lo será para los pequeños pero si lo practicamos será más sencillo cada vez. Esta secuencia la debemos repetir 3 veces al día así creará una rutina y la debemos asociar a la relajación. El ejercicio de respiración en sí consiste en:

  1. Tomar aire lentamente y profundamente por la nariz mientras contamos hasta tres intentando llenar todos los pulmones y observando como el abdomen sale hacia fuera.

  2. Realizamos una pequeña pausa de pocos segundos.

  3. Soltamos el aire por la boca mientras contamos hasta tres lentamente. Notaremos como el abdomen se mete hacia dentro.


Podemos crear en casa un lugar especial de relajación o para meditar en casa y podemos acompañar este espacio con unas gráficas amigables para los niños en donde puedan relacionar el “espacio especial” con la respiración de relajación y así entenderán que cada vez que se sientan ofuscados o molestos deben ir a su espacio, señalar en que rango está su fastidio en un “termómetro” que indicará el rango de malestar en el niño y así podremos ayudarlo, realizar la respiración y por último contar de 20 a 1 en forma regresiva.



Por ejemplo: Si #LittleF se fastidia o se siente molesto, buscará su “espacio especial” en donde pueda pensar y si estamos acompañándolo en este proceso podríamos preguntarle en qué grado esta su malestar (eso le ayuda a identificar la magnitud y estar consciente de lo que siente) y deberá realizar los pasos de la respiración de relajación y para terminar contará del 20 al 1 en forma regresiva (el popular cuenta hasta 10) y luego se sentirá mejor! Podemos trabajarlo como padres así como la meditación ya que nuestros hijos trabajan a través del ejemplo y los beneficios son sumamente positivos para nuestro cuerpo y mente.

DIVERSAS TÉCNICAS DE RESPIRACIÓN PARA NIÑOS


1) Técnica del globo: El niño se tumba en un espacio cómodo y tranquilo boca arriba. Podemos suavizar la luz, poner una música suave y asegurarnos de que la temperatura de la habitación sea buena, ni frío ni calor. Le pediremos al niño que ponga ambas manos sobre su barriguita e imaginaremos que su barriga es un globo. Tendrá que respirar muy profundamente hasta conseguir que el "globo" se hinche. Luego lo deshincharemos muy lentamente.

Repetiremos tantas veces como queramos.


2) Técnica del barco: Esta técnica se basa en la primera. En la misma posición, pero ahora con las manos extendidas a los lados de su cuerpo, explicaremos al niño que su barriga es el mar, con las olas y colocaremos un barquito de papel o de juguete, que no pese mucho sobre su barriga. Guiaremos su respiración profunda hasta que el niño consiga mover el barco simulando que navega por el mar.



3) Técnica del paseo por el prado:

En esta ocasión, nos situamos de pie con el pequeño y le relatamos que vamos a pasear por un prado lleno de flores. Cualquier cosa que esté en la habitación puede convertirse en una hermosa flor repleta de olor. Iremos paseando, calmados, despacio y nos agacharemos a oler profundamente cada flor. Inspiraremos el olor y expiraremos suavemente, pero expulsando todo el aire.


4) Técnica del oso perezoso:

El oso perezoso es un animal muy lento, por supuesto, podemos elegir cualquier otro animal calmado que nos apetezca. Imaginaremos que somos ese animal y caminaremos por la habitación como él lo haría, muy muy despacito. Acompañaremos al niño en el juego y le recordaremos que también tiene que respirar con calma.


Son técnicas sencillas y que nos ayudan a tener de buenos momentos con los nuestros hijos.


Podemos practicar estas técnicas regularmente o cuando el niño se ponga nervioso, por ejemplo después de una rabieta o mejor aún, para anticiparse a ella.


Si las practicamos con ellos, además de divertirse, aprenderán que son capaces de controlar sus emociones y se fortalecerá su vínculo.


http://psico-crianza.blogspot.pe/2014/07/ensenando-los-ninos-relajarse-tecnicas.html
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